La próxima semana inician la renovación de los 13,80 kilómetros de esta carretera, con una fase de socialización. Junto a los dirigentes parroquiales y representantes de las empresas de transporte de pasajeros se establecerán rutas alternas de movilización. La obra a cargo del Consorcio Vialidad Imbabura, cuesta 2.5 millones de dólares.
Buenas noticias para Imbabura. La vía que conecta a la parroquia San Antonio, del cantón Ibarra, con Peguche, en el cantón Otavalo, será reparada totalmente. Los trabajos iniciarán en los próximos días. Así informó la Prefecta subrogante, Cristina Males, el 2 de febrero, durante la firma del contrato del proyecto de adoquinado de esta importante arteria vial de 13,80 km.
La obra incluirá la remoción de la actual carpeta asfáltica, que está llena de baches y fisuras. Luego se colocará como estructura una capa de sub-base, clase 3, con espesores variantes de 25 a 40 centímetros. Y, finalmente, una capa de rodadura de adoquines de alta resistencia.
La Prefecta prefirió dejar su oficina y recorrer la carretera, conocida también como la Vía Antigua, para dar personalmente la noticia a los vecinos y usuarios del ramal. Acompañada de los técnicos del Gobierno Provincial explicó detalles y respondió a las inquietudes de la ciudadanía. Informó que la obra estará a cargo del Consorcio Vialidad Imbabura, que tiene 180 días de plazo para entregar la vía renovada. La obra tiene un costo de 2.5 millones de dólares.
La interrogante de la mayoría de ciudadanos fue que por qué se colocará adoquín y no asfalto. Según Dillon Leyton, director de Vialidad e Infraestructura de la Prefectura, esa es la opción que recomendó el consultor del proyecto, tomando en cuenta que la zona por donde atraviesa el camino está en constante expansión. Es por eso que se prevé que cuando un vecino requiera colocar un instalación de agua potable o alcantarillado, por ejemplo, se pueda remover con facilidad los adoquines y volver a colocarlos luego en su sitio, sin causar mayor impacto. Eso no se podría hacer si se coloca una capa de asfalto.
Los encuentros de la Prefecta con la ciudadanía se realizaron en San Antonio de Ibarra, Natabuela, Ilumán y Peguche. Ahí habitantes como Diego Guamán, presidente del barrio San Vicente, de San Antonio, agradecieron el anuncio que les devuelve la esperanza de días mejores tras muchos años de espera.
Cristina Males explicó que el Prefecto titular, Pablo Jurado, que está de vacaciones, es el más interesado en el mejoramiento vial de la provincia. Aseguró que querían dar inició al proyecto de adoquinado de la vía San Antonio-Peguche en el 2022. Pero, que por los trámites para concretar un crédito con el Banco Ecuatoriano de Desarrollo y papeleos de la contratación pública se alargó este proceso que inició hace tres años.
Según Patricio Vaca, representante del Consorcio Vialidad Imbabura, las labores iniciarán la próxima semana con una fase de socialización con los dirigentes de las parroquias y representantes de las empresas de transporte de pasajeros. La idea es establecer rutas alternas que permitan la movilización de los habitantes de estos sectores, mientras duran los trabajos. Cristina Males aseguró que aunque están próximos a concluir su gestión, como autoridades de la Prefectura, están comprometidos en cumplir las ofertas que realizaron a favor del desarrollo de Imbabura.