Obras de ingeniería civil, utilizando técnicas modernas, permitieron construir una carretera de primer orden, en una zona identificada por tener un suelo inestable. Partiendo desde los estudios, se construyó estructuras para estabilizar los taludes y cruce sobre la quebrada afluente del río Mataquí, el asfaltado en el tramo abscisa 1+600 – 1+900 e infraestructuras complementarias. El tramo fue ampliado mediante vigas metálicas, plataformas de corona y cunetas para desviar el agua de una de las quebradas contiguas.
IBARRA.- El macro proyecto vial ejecutado por la Prefectura de Imbabura en el sector El Infiernillo del cantón Pimampiro está a punto de culminar. El organismo tiene trazado como meta entregarlo a finales del mes de diciembre de 2019, prácticamente como un regalo navideño para los habitantes de las parroquias Chugá, Sigisipamba y Pimampiro en donde se encuentran asentadas 24 comunidades.
Alrededor de 700.000 dólares fueron invertidos en la construcción de la estabilidad de taludes y cruce sobre la quebrada afluente del río Mataquí, el asfaltado en el tramo abscisa 1+600 – 1+900 y obras necesarias en el tramo que comprende El Infiernillo, de la vía Pimampiro – Puente sobre el río Mataquí, una zona de alto riesgo para el paso de vehículos y personas por la presencia continua de deslizamientos de tierra y caída de la mesa.
“En el desarrollo de esta administración nos preocupamos por el riesgo permanente que existía para la movilización en este paso, que, tiempo atrás, ya provocó accidentes y pérdida de vidas humanas. Frente a esta realidad tomamos la decisión de contratar una consultoría para definir el tipo de obra que se debía realizar. Esto permitió que se pueda ejecutar un proyecto de alto impacto para poner fin a este problema y dotar a los habitantes de una carretera de primer orden”, afirmó el prefecto Pablo Jurado, durante un recorrido realizado por el lugar.
Armando Chávez, alcalde del cantón, destacó lo que según él es una “obra bien hecha”. Para la autoridad de la localidad, la clave fue la utilización debida de los recursos económicos destinados a la elaboración de los estudios, pues esto permitió identificar a ciencia cierta el tipo de trabajos que debían ser aplicados en la vía, caracterizada por un suelo colapsable y presencia de agua que provoca destrucción. “Tenemos un proyecto que ha utilizado el potencial de la ingeniería civil para llevar a cabo la ampliación y desvío correcto del agua”.
Imbavial, Empresa Pública de la Prefectura, se encargó de ejecutar este contrato. Fue designada mediante régimen especial, señalado en la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Contratación Pública. La empresa puso en acción todo su potencial de maquinaria, materiales, obreros y dirección técnica para el cumplimiento del objetivo. El proyecto exigió responsabilidad, cumplimiento de los más altos estándares de calidad y de un cronograma estricto de trabajo.
Como parte de esta tarea, el organismo provincial puso en marcha el mejoramiento y ampliación de la vía alterna, en una longitud de 2.50 kilómetros, con un ancho de 6 metros. Antes de eso, la arteria se encontraba en malas condiciones y no prestaba facilidad para la movilización. Se realizaron trabajos de excavación, conformación de la capa de rodadura, lastrado con material de mejoramiento y conformación de cunetas. Una intervención similar se llevó a cabo en el sitio que une con Pimampiro en una longitud de 1.50 kilómetros.